Como comentamos en clase, Paul Lafargue, yerno de Marx y propagandista de la AIT, escribió a fines del S.XIX un libro titulado El derecho a la pereza, donde defendía que con el nivel técnico que se había alcanzado en la época era posible producir todo lo que la población necesitase para vivir sin necesidad de tener jornadas laborales interminables. Lafargue consideraba que sería suficiente con que cada persona trabajase 3 horas al día. De esta manera, el trabajo se repartiría, no habría desempleados ni gente que pasase hambre y los trabajos desagradables (como recoger la basura) se realizarían por turnos. El tiempo libre podría dedicarse al ocio, la creatividad y al disfrute físico e intelectual de la vida.
Aquí tenéis un enlace a El derecho a la pereza, por si estáis interesad@s en leerlo:
El debate sobre el reparto del trabajo sigue vigente, especialmente con los altos niveles de desempleo en los países más industrializados. En los siguientes enlaces tenéis unos interesantes artículos sobre este tema:
- Elogio de la pereza, de Luisgé Martín:
- ¿Es necesario trabajar para vivir? de los sociólogos J. García y Alberto Riesco:
- ¿Trabajar más para salir de la crisis?
- Proletarios, !extinguíos! El postcapitalismo como no-trabajo, de Alberto Riesco
- Entrevista a José Antonio Pérez, autor del libro 69 razones para no trabajar demasiado:
Y la reseña sobre este último libro:
Os invito a responder a la pregunta del título o a dar vuestra opinión sobre este tema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario